La menopausia marca el inicio de un capítulo significativo en la vida de la mujer, a menudo acompañado de retos tanto físicos como emocionales. Este trascendental cambio hormonal, que típicamente se manifiesta entre los 45 y 55 años, es conocido por desencadenar una serie de transformaciones que impactan profundamente en el bienestar femenino.

Uno de los aspectos que suscita mayor inquietud entre las mujeres durante la menopausia es el cambio en la composición corporal, particularmente el aumento de peso por acúmulo de grasa. Este artículo se enfoca en desentrañar las razones detrás de estos cambios y en ofrecer una perspectiva que ayude a manejar y entender mejor esta fase natural de la vida.

La menopausia: comprendiendo los cambios hormonales

La menopausia es una transición natural que señala el fin de la edad fertil y conlleva una disminución significativa en la producción de hormonas sexuales, como el estrógeno y la progesterona, pilares fundamentales para la salud femenina.

Este ajuste hormonal es el protagonista de numerosos cambios físicos. Es crucial estar informadas y preparadas para esta etapa, permitiéndonos abrazar los cambios con conocimiento y positividad, y continuar celebrando nuestro cuerpo y nuestra identidad como mujeres.

¿Qué cambios ocurren cuando pasamos por la menopausia?

Además de la interrupción del ciclo menstrual, se producen cambios que debemos tener en cuenta:

Alteraciones metabólicas

Junto con la interrupción del ciclo menstrual, la menopausia también desencadena alteraciones metabólicas. El metabolismo tiende a volverse más lento, lo que puede resultar en un aumento en la dificultad para mantener o perder peso. Este cambio metabólico a menudo se traduce en un aumento de grasa, especialmente en el área abdominal.

Redistribución de la grasa corporal

Otro cambio distintivo es la redistribución de la grasa corporal. Las mujeres tienden a experimentar un aumento en la acumulación de grasa en el área abdominal, lo que contribuye a la modificación de la figura y puede ser un factor significativo en el aumento de peso durante la menopausia. El que se produzca el aumento en el abdomen no es ninguna casualidad, esto se debe a que la grasa abdominal tiene un componente hormonal importante. Esa grasa corporal aumentó en la pubertad para tener la primera menstruación, y de nuevo. 35 años más tarde intenta volver a arrancar el ovario para, sin éxito, devolvernos a la juventud.

Cambios en la piel y el tejido conectivo

La disminución de los estrógenos también afecta a la piel y el tejido conectivo. La piel se va atrofiando, volviéndose más delgada, menos elástica y propensa a la sequedad. La pérdida de colágeno y elastina contribuye a la aparición de flacidez y cambios en la textura de la piel.

Aumento de peso y grasa durante la menopausia ¿Por qué se produce?

Centrándonos en el aumento de grasa y peso existen múltiples causas. La disminución de estrógenos puede influir en la redistribución de la grasa hacia el área abdominal. Además, los cambios hormonales pueden provocar una desaceleración en el metabolismo, haciendo que el cuerpo queme calorías con menos eficiencia y por lo tanto ayudar también a la ganancia (necesitamos consumir menos kilocalorías por día). Como hemos dicho anteriormente, el organismo vuelve a recordar el mecanismo por el que logró hacer funcionar los ovarios y ahora, sin éxito, insiste en producir más grasa hormonal.

¿Todas las mujeres pasan por este aumento de peso durante la menopausia?

Si bien no todas las mujeres experimentan un aumento de peso significativo durante la menopausia, todas ellas presentan esta redistribución y es una preocupación común. Factores genéticos, estilo de vida, y la salud general de cada mujer pueden influir en cómo su cuerpo responde a estos cambios hormonales.

¿Cuándo se deja de engordar en la menopausia?

No hay una respuesta única para esta pregunta, ya que varía según cada mujer. Sin embargo, abordar los cambios en el estilo de vida puede ser un factor clave y esencial para mantener un peso saludable. Sí es cierto que llega un momento en el que el organismo se da cuenta que ese ovario no va a volver a funcionar y deja de intentarlo. Se calcula que este periodo viene a ser de unos 5-10 años, en los que el organismo se resistirá a perder peso por muy estrictas que seamos

¿Cuál es la mejor manera de prevenir el aumento de peso durante la menopausia?

Aquí es donde podemos tomar medidas proactivas para abordar el aumento de peso y la acumulación de grasa:

Muévete más

Incorporar actividad física regular es esencial. No solo ayuda a quemar calorías, sino que también mejora el estado de ánimo y la calidad del sueño, dos aspectos fundamentales durante la menopausia. Con el ejercicio ayudamos a contrarrestar el aumento de peso, aunque no consigamos bajarlo.

Come con moderación y de forma equilibrada

Adoptar una dieta equilibrada, rica en frutas, verduras, proteínas magras y granos enteros, puede ayudar a mantener un peso saludable. Controlar las porciones también se vuelve más prioritario que antes. Nuestro cerebro nos pedirá más dulces y grasas por lo que nuestro objetivo será controlar esos deseos.

Limita el consumo de alcohol

El alcohol puede contribuir significativamente a las calorías totales diarias. Limitar su consumo puede marcar la diferencia en el control de peso. Recordemos que el alcohol es una fuente de calorías gratuitas que no nos aportan nutrientes por lo que debe ser excepcional su consumo.

Busca ayuda nutricional y apoyo psicológico

Consultar con un nutricionista puede brindar orientación personalizada sobre hábitos alimenticios saludables y estrategias específicas para abordar el aumento de peso. Los cambios hormonales van a producir cambios sustanciales en el humor por lo que aparece tendencia a la irritabilidad y a la depresión, por ello buscar un apoyo psicológico en esta etapa es fundamental para aceptar los cambios y vivirlos con positividad. Una gran etapa se abre ante nuestros ojos.

Combate la grasa corporal y recupera tu figura sin la necesidad de cirugía

La medicina estética ofrece opciones no invasivas para combatir la grasa corporal. Desde procedimientos no invasivos hasta tratamientos específicos para áreas problemáticas, estas opciones pueden ser consideradas para recuperar la confianza en la figura sin necesidad de cirugía. Porque recordemos que no todos los tratamientos para la grasa son efectivos en la menopausia.

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