¿Cómo cuidar la piel a partir de los 50 años?
Cuando cumplimos 50 años nuestra piel que hasta ahora ha estado protegida por nuestra juventud hormonal sufre una serie de cambios que hace necesario que adecuemos nuestros cuidados a sus nuevas necesidades.
¿Qué cambia en la piel a partir de los 50?
Nuestra juventud hormonal ha mantenido hasta ese momento la tersura de la piel, mostrando una piel densa con colágeno y elastina que a partir de los 50 años y con la caída de los estrógenos y la llegada de la menopausia vuelve a nuestra piel más fina y deslustrada. Vemos en un periodo corto de tiempo un cambio importante en el aspecto de nuestra piel. Aparece más apagada y sobre todo con menor espesor lo que hace que marque con más facilidad arrugas de expresión y se vuelva más flácida.
Arrugas y marcas de expresión
La piel madura a partir de los 50 pierde elasticidad y colágeno con lo que presenta mayor cantidad de arrugas y marcas de expresión que se van haciendo más profundas, con lo que es necesario que trabajemos en este aspecto para volver a rejuvenecerla.
Resequedad en la piel a partir
Con la pérdida de estrógenos y la llegada de la menopausia aparece la temida sequedad que también se refleja en nuestra piel. Es una piel más fina con menor densidad que le cuesta más retener agua y sobre la que debemos actuar para devolverle turgencia.
Flacidez en la piel
Nuestra piel más fina con menos colágeno muestra una mayor flacidez que junto a la pérdida de densidad en las estructuras óseas que conforman nuestro rostro lleva a la aparición surcos, con cambio también en la disposición de nuestro compartimento graso a nivel de la cara, viendo como los pómulos y mofletes que lucíamos en nuestra juventud disminuyen y se caen.
Aparición de manchas
La acción del sol a nivel de la piel madura lleva consigo la aparición no solo de manchas si no de destrucción del colágeno. Es por ello por lo que en pieles que han tomado mucho sol se puede ver un envejecimiento prematuro de la piel con una piel más fina y rota. Pero…
¿Podemos hacer algo para evitarlo? ¿Funcionan las cremas a partir de los 50 años?
Por supuesto. Ante todo, es necesario realizar un análisis de la piel y evidenciar con ello el estado en el que se encuentra en cuanto a humedad, componente graso, cantidad de colágeno, pigmentación de la piel, sensibilidad de la misma, textura de la piel y arrugas, etc. En base a ellos deberemos hacer un tratamiento integral que incluya tanto tratamientos médicos como tratamientos domiciliarios personalizados con el objetivo de corregir en base a las necesidades detectadas. Una personalización del cuidado facial diario según las necesidades de nuestra piel nos ayudará a devolverle la luminosidad y la turgencia. Aporte de hidratación extra, isoflavonas para compensar y tratar a nivel de la piel la llegada de la menopausia, reequilibrar la grasa y agua de la misma, aportar sustancias antioxidantes como la vitamina E, vitamina C, el retinol, etc formarán parte de nuestra rutina diaria
¿Cómo puedo rejuvenecer el rostro a los 50 años? Descubre el lifting facial SIN CIRUGÍA (HIFU)
La tecnología HIFU o ultrasonidos focalizados de alta intensidad aplicados a nivel facial consiguen generar rápidamente y en grandes cantidades colágeno. Una vez detectada la cantidad de colágeno que tenemos será el médico el que nos indique el número de sesiones necesarias para alcanzar un nivel optimo o incluso superior al de nuestra edad biológica. Es importante recordar que para crear colágeno necesitamos estimular las células que fabrican colágeno, los fibroblastos. Estas células se activan gracias al calor entre otros estímulos, siendo éste un mecanismo que las estimula para producir colágeno tipo I mayoritariamente. Una vez estimuladas precisan de nutrientes, esto es, aminoácidos procedentes del colágeno para fabricar nuevo colágeno junto con silicio que aporta firmeza estructural a dicha molécula. Es por ello que para conseguir un resultado óptimo necesitemos combinarlo con la toma de colágeno y silicio vía oral unas semanas antes y unos meses después de realizado el tratamiento.
La tecnología HIFU estimula la piel gracias a la producción de calor focalizado en profundidad a nivel de la máscara que sujeta nuestra piel. Esta máscara se denomina SMAS y sostiene la musculatura mímica de nuestra cara. El paso del tiempo y la gravedad llevan a una perdida de colágeno y de elastina que se traduce en flacidez. Es por ello que este tratamiento retensa dicha máscara dando un resultado de lifting facial sin cirugía.
El paso de los años nos afecta a todos y la piel es una de las más afectadas en este proceso ¿Necesitarías ayuda profesional para eliminar las manchas o arrugas? No dudes en ponerte en contacto con nosotras.
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